Esto es Westerplatte. Está a las afueras de Danzig. El 1 de septiembre de 1939, los alemanes comenzaron a disparar contra el destacamento que había allí y, así, comenzó la II Guerra Mundial. Estos días han estado, obviamente, de conmemoraciones por el 70 aniversario. Angela Merkel hizo un sentido discurso y Putin publicó una columna en un diario polaco. La columna ha sido polémica. Dice Putin ahí que el pacto Ribbentrop-Molotov “no fue moral”, pero ni se pide perdón ni se asume responsabilidad rusa alguna en la guerra. Como pueden apreciar en la fotografía, se conserva el edificio del destacamento tal y como lo dejó la batalla. Se pueden ver, incluso, los agujeros de bala. Se halla rodeado, claro, de inscripciones con los nombres de los fallecidos y diversas loas al ejército polaco.
De todas formas, lanzo algunas preguntas, con afán un tanto revisionista:
1. Como se sabe, la II Guerra tiene sus raíces en la I. El Tratado de Versalles resultaba indignante para Alemania. Se trataba de un Diktat de los Aliados que no podía acabar bien. ¿Me mueve sólo el ansia provocadora si digo que la culpa de la Guerra fue más de Clemanceau que de Hitler?
De todas formas, lanzo algunas preguntas, con afán un tanto revisionista:
1. Como se sabe, la II Guerra tiene sus raíces en la I. El Tratado de Versalles resultaba indignante para Alemania. Se trataba de un Diktat de los Aliados que no podía acabar bien. ¿Me mueve sólo el ansia provocadora si digo que la culpa de la Guerra fue más de Clemanceau que de Hitler?
2. Los nazis hicieron correr la leyenda de "la puñalada en la espalda". Según ésta, Alemania no había perdido la guerra sino que sus políticos había traicionado al ejército firmando la paz. Después se ha repetido que dicha idea es una leyenda, dado que Alemania había llegado al colapso económico. Pero la situación militar, recordémoslo, era en ese preciso momento, muy favorable para Alemania. Estaba, de hecho, a las puertas de París. ¿Fue la leyenda de la puñalada en la espalda una leyenda?
3. Uno de los 14 puntos de Wilson dictaba la independencia de Polonia y, acabada la guerra, así se cumplió; ahora bien, quien organizó realmente el Estado polaco durante la guerra fueron los alemanes. Rusia tiene mucho que callar a ese respecto, recordemos que ya acabada la guerra, los bolcheviques aún intentan conquistar territorios polacos. Si a esto sumamos el pacto nazi-soviético, ¿tiene Merkel mucho más para pedir perdón que Putin?
4. Tras la guerra se instaura el llamado Corredor de Danzig, para romper Alemania en dos. Pero la población alemana allí era muy considerable. Al fin y al cabo, los nazis simplemente azuzaron el sentimiento unionista germano: en las elecciones de 1933 los nazis locales obtienen el 38% de los votos. ¿Fue justo hacer Danzig polaca y crear el Corredor?
Continuará...
Todo tiene causas, incluso las causas tienen causas. Si Clemanceau es culpable ¿quién es el cumpable de la política de su famoso "Alemania pagará"?
ResponderEliminarBuen post
saludos
El señor Putin tiene pinta de chulo indolente, con esa mira fría y el gesto impasible ante el dolor ajeno. No me fío de él ni un pelo. Su actitud y sus declaraciones ante el pacto germano soviético para el reparto de Polonia cuadran perfectamente con lo que comento.
ResponderEliminarUn saludo.
Puedes estar contento, el “ansia provocadora” impregna todo el post.
ResponderEliminarSobre el segundo punto, no es cierto que Alemania estuviera en una posición más favorable. Aunque estaba a las puertas de París, recordemos también que las trincheras apenas se movían unos metros en varios meses, metros que eran recuperados por el enemigo unos meses más tarde. Podríamos decir que se encontraban en tablas, pero… apareció Estados Unidos y decantó la balanza. Desde ese momento Alemania no podía continuar luchando. Es más fácil pensar que hay traidores en tu bando que reconocer que te han vencido, a ti, a la Gran Alemania.
Pienso que si Stresemann ni Briand hubieran muerto tan pronto, no hubiera habido 2GM. Los derechos que Alemania solicitaba que le fuera reconocidos y el fin de los pagos por las reparaciones, hubiera finiquitado gran parte de las diferencias.
ResponderEliminarSaludos desde el sur.
Felicidades por el blog.Me ha encantado lo que he leido en un ratejo.Te descubrí a través del blog de J.Hernández.
ResponderEliminarPor partes.
1-Por inicua y deleznable que fuese la Paz de Versalles de 1919(que lo era y mucho),no puede achacársele ni a ésta ni a sus demiurgos la detonación de la IIGM.Hitler y su régimen fueron sus artífices,y Versalles sólo un pretexto más que usaron para alcanzar el poder soliviantando a las masas.
Para cuando los nazis alcanzan la Cancilleria en 1933,el Sistema de Versalles está roto:El frente de Stressa se ha cuarteado,con Italia cambiando de bando,Gran Bretaña eludiendo cualquier sanción a Alemania por los retrasos en los pagos y Francia arruinada y sola.EEUU por su lado,hacía una década que no sólo había renegado de Versalles tacitamente sino que prestaba generosamente dinero a Weimar hasta el gran Crack.
En otras palabras,hubiese bastado una Alemania unida y fuerte para afianzar la alianza con Italia y CentroEuropa(temerosas del Comunismo),pactar con Inglaterra y aislar a Francia.La incorporación de Austria era inevitable y pura inercia...Alemania no necesitaba una guerra para nada.Fue la megalomania psicótica de Hitler la culpable en última instancia.
2-El 11 de noviembre de 1918,cuando se firma el Armisticio,los alemanes están en retirada desordenada,el Frente está roto,no hay reservas,Bruselas y Amberes a punto de perderse y la relación de divisiones Aliados-Alemania era de 4-1...eso sin contar los ingentes refuerzos americanos que todos los dias llegaban por mar.Alemania estaba perdida:O pedía la paz o sería invadida.Es un hecho.Hindemburg y Ludenndorf eran del mismo parecer.No hubo ninguna puñalada por la espalda,solo desesperación y rabia ante la derrota.
3-Lo de Dantzig fue por joder a Alemania y darle un puerto a Polonia.Una política alemana de apoyo a Lituania y Polonia contra la URSS habría permitido al final alcanzar un acuerdo satisfactorio.
4-En lo demás,en especial en las responsabilidades rusas no asumidas por Putin,estoy de acuerdo contigo.
Salu2.
Gracias a todos por los comentarios y a David por los elogios. Me animan a seguir escribiendo. Veo complacido que entre los comentaristas hay nivel. En fin, sólo quería polemizar un poco y repensar ciertos aspectos bajo una nueva luz. Quiero decir ahora:
ResponderEliminar1. Con Álex, las causas tienen causas y el "Alemania pagará" de 1919 viene de la guerra de 1870, pero Alemania no trató a Francia con la saña con la que se le trató a ella en Versalles.
2. Sí, Hitler quiso la guerra. Ahora bien, es normal que los alemanes quisieran revertir Versalles, y no sólo la cuestión de los pagos, la desmilitarización, el Ruhr, etc., sino la cuestión de las fronteras. Esa cuestión me parece fundamental. Quizá la teoría del Lebensraum proceda, en mucha parte, de ahí.
3. Cinco meses antes del armisticio del 11 de noviembre, el ejército alemán ocupaba casi toda la parte occidental de Rusia, rodeaba Kiev, llegaba a zonas orientales como Georgia, a la frontera de Bulgaria con Grecia y el valle del Po en Italia. Gracias a su alianza con Turquía, se extendió hasta el norte de Arabia y Persia. Arriba, Suecia mantenía su neutralidad cordial y Alemania ayudaba a Finlandia a escapar del yugo blochevique. A donde voy a parar: de no haber entrado los EE.UU. en la guerra, ésta acaba en tablas. Y sin Tratado de Versalles, no sé cuánto hitlerianismo habría emanado de la sociedad alemana.
4. La amputación de territorios que sufrió Alemania tras la guerra, fue injusto. Las fronteras fueron antinaturales (piénsese en la creación de los Estados de Yugoslavia o Checoslovaquia). A Polonia le tocó el gordo, aunque a veces hubiera que pasarse por el forro los resultados de los plebiscitos, como sucedió en la Alta Silesia.
Espero escribir en breve sobre estas cuestiones. Y, sobre todo, recibir sus comentarios.