miércoles, 9 de septiembre de 2009

Hermanos de Armas

El día, a pesar de ser julio, ha amanecido revuelto en Varsovia. Unas nubes amenazantes y una brisa fría nos recuerdan los kilómetros que nos separan del Mediterráneo feliz y caluroso. Aparcamos en la misma puerta de la iglesia, y gratis; en Polonia no explotan, tampoco, la ORA. En ciertas ciudades, ni tan siquiera el puro centro es zona azul. Un par de grupos se nos adelantaron y hacen las fotos de rigor. Son todos polacos y de diversas edades, así que no consigo una conjetura coherente acerca del tipo de grupo. Ni campamento de verano, ni Inserso, pero ¿qué? Se trata del monumento varsovita a los caídos en Katyn. Cientos de placas en los muros, cientos de cruces, cientos de flores.

En la conmemoración del 70 aniversario del estallido de la II Guerra, Putin ha intentado relajar un poco la incómoda relación que Rusia mantiene con Polonia. Al artículo en el que calificó de "error moral" el pacto Molotov-Ribbentrop se ha añadido el discurso en Westerplatte, en el que afirmó que "los rusos y los polacos lucharon juntos contra un enemigo común" en una guerra en la que "los rusos vieron a los polacos como sus hermanos de armas". Ahora bien, Putin no optó por hacer mutis por el foro respecto a Katyn. Reconoció que semejante masacre del Ejército Rojo había causado una gran conmoción en Polonia. Con todo, invitó a los polacos a tomar la senda alemana y olvidar amargos sucesos del pasado para poder construir una sólida relación económica y política con Rusia.

Eso sí, el Servicio de Inteligencia ruso ha amenazado recientemente con hacer públicos unos documentos inéditos acerca de la política de Varsovia en los años 1939-1945, en los que, al parecer, Polonia habría apoyado la invasión nazi de la Unión Soviética. Este junio, recuerdo, el ministro de exteriores ruso publicó un artículo en su págica web en el que culpabilizada a Polonia de la II Guerra, por no acceder a las "moderadas" peticiones de la Alemania nazi.

¿"Hermanos de armas"? Como se sabe, el Ejército Rojo aguardó en la otra orilla del Vístula a que los nazis, por orden personal de Hitler, devastaran Varsovia, para entrar. Así, encontrarían deshecha la ciudad, pero también al ejército polaco, que, previsiblemente, no llevaría bien la invasión soviética. De hecho, los que quedaban fueron deportados a Siberia. Años antes, al comienzo de la guerra en septiembre de 1939, aprovechando el pacto Ribbentrop-Molotov, Stalin había invadido la parte oriental de Polonia sólo un par de semanas después de que Hitler hiciera lo propio con la occidental. Preguntado un alto mando soviético acerca del futuro de Polonia, éste contestó: "¿Polonia? Polonia ya no existe."

En Katyn se ejecutaron a alrededor de 20.000 polacos (oficiales del ejército, profesores, etc.), mil arriba, mil abajo. Durante décadas, la Unión Soviética negó su responsabilidad y la cargó sobre Alemania. (Las balas alojadas en los cráneos eran alemanas, pero el pacto de no agresión conllevaba también cooperación material). De hecho, las fosas fueron descubiertas por la Wehrmacht, no parece muy lógico descubrir el propio acto de uno. Cómo no, fue Gorbachov quien reconoció la autoría soviética.

"Nuestro deber", ha dicho Putin, "es deshacernos del peso de la desconfianza y el prejuicio que nos ha legado el pasado en las relaciones entre Polonia y Rusia". Estoy de acuerdo, pero de momento, hoy, parece que va a llover.

1 comentario:

  1. Este Putin es un tipo de poco fiar. Y eso de que los rusos y los polacos son "hermanos", con el Pacto de no agresión Molotov Ribbentrop para repartirse Polonia es para echarse a llorar. A Polonia siempre la han ninguneado como país los dos poderosos que han estado rodeándola.

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